"La otra"


La primera vez que fui "La otra" tenía 13 años, el mae con el que me acostaba tenía 19 años y él tenía una novia con nombre de tierrosa.
La verdad no me molestaba ser la amante, me daba igual, sabía que él no me podía gustar, no me podía enamorar de él, entonces ser “La otra” me ayudaba a establecer ese límite. 
Al principio fue difícil, no me gustaba, me sentía usada... pero con el tiempo me fui acostumbrando, me daba igual que la muchacha le escribiera, porque a fin de cuentas yo era la que realmente lo tenía, ella podía creer que tenía el amor o respeto de él, pero era mentira, en el fondo él me prefería a mi de 13 años y no a ella con sus 22 años. 
Me comencé a sentir feliz de ser "La otra", además era más fácil, podía andar con otros muchachos o muchachas, no tenía que hablarle bonito a él, no tenía que escribirle todos los días ni contarle de mi día, no había que hacerle cartas, darle regalos o escribirle mensajes largos una vez al mes por nuestro aniversario. 
Me gusta ser "La otra" porque es fácil, no hay complicaciones, son solo besos y sexo, nada más, no hace falta el amor, no hay peleas, no hay celos, cuando sos “La otra” no te pueden dar vuelta. 
He sido la amante muchas veces, pero hay una persona de la que amo ser "La otra", de 3 minutos (yo le puse ese apodo), porque él siempre me pone de primera, me gusta el descaro que tiene con la novia o el ligue porque si yo se lo pido les cancela, soy "La otra" pero soy la #1.
Me gusta como mi cuerpo lo vuelve loco, como cuando me ve me arranca la ropa y me dice "que ricas tetas", como me besa, como me adora, pero no me ama, él no me quiere, él me desea y eso me encanta. 
No me gusta ser la novia o el ligue, eso es complicado, ser "La otra" es más fácil y no, nadie nos utiliza, nosotras (Las otras) estamos conscientes de que hay alguien más, pero que esa persona no es suficiente, sabemos que nosotras si logramos complacer a esa persona, que somos mejores que la novia o el ligue, tenemos la mejor posición del mundo, el problema es que existen alguna tontas que se enamoran de la persona que está poniendo los cuernos... esa es la primera regla, si sos "La otra" no te podes enamorar, está prohibido. Pero no las culpo, no siempre es fácil no enamorarse, se requiere mucha práctica para poder decirle a tu cerebro de quien te podés enamorar y de quien no. 
Solo las y los que han sido “Los otros” entenderán de lo que hablo, nosotros no somos los malos, los malos son los que ponen los cuernos, el problema es cuando vos has estado en las dos posiciones, en ese caso sos una mierda.